La felicidad y otras enfermedades mentales
Ayer fui por primera vez en mi vida a un psicólogo.
Me vapuleó.
Fui con Jaime.
Nos vapuleó.
Es curioso que lleve un par de días pendiente de escribir un post sobre la felicidad, porque yo siempre me he considerado feliz,
porque siempre he considerado que la felicidad tenía que ver, sobre todo, con la actitud de uno mismo.
Pensaba hablar de lo saludable que es la tolerancia, la empatía, la humildad. Pensaba hablar de lo facil que podía ser todo si uno se pone del lado del de enfrente…
Hoy no voy a desarrollar ese tema, tal vez en otro momento.
Es curioso, tambien, que lleve varios días rondandome la cabeza una estrofa de una canción que hace muuuuuchos años que no escucho. Es una canción de Cristina Rosenvinge, y la estrofa es esta:
Yo soy buena chica,
o por lo menos lo parece.
Porque nadie me mira
cuando muerdo las paredes.
La cosa es que, efectivamente, llevo varios años mordiendo las paredes de mi casa.
No me preocupaba en exceso porque soy mas "de tirar p'alante" que de preocupaciones. Tambien porque era cada vez menos a menudo y porque conseguía, a veces a duras penas, seguir siendo feliz (según mi criterio) y porque, al fin y al cabo….
¿Quién no muerde las paredes de su casa de vez en cuando?
Hoy me siento fatal.
Y al mismo tiempo me siento genial porque, ayer, alguien me “dió permiso” (ponedle 6 o 7 pares de comillas más, por favor) para sentirme fatal. Para no ser yo la que cuidara a los demás (la tolerante, la empática…. ) para que alguien que me quiere, cuide de mi. Anda, como otra canción de Cristina
Pobre. La que le espera.
A lo mejor no es tan normal morder las paredes…. mira tu por donde.
O a lo mejor a lo que yo llamo morder las paredes…. es algo peor.
Parece que yo tambien tengo derecho a ser irresponsable e inmadura alguna vez y a otro me desfaga los entuertos… No sé, la teoría suena muy bien.
Y eso que el psicólogo era un poco…. charlatán, la verdad.
Utiliza unas herramientas que mi mente escéptica no puede aceptar así por las buenas….
Pero mi mente escéptica duda de los sies y tambien de los noes, y ayer, jugando conmigo de mala manera (que conste que me doy cuenta) me ayudó.
Estoy mas tranquila, me siento menos estresada, mas segura e incluso menos cansada.
Va a ser que lo necesitaba.
Que bien, a ver como evoluciona todo esto.
Movilizando que es gerundio.
Me vapuleó.
Fui con Jaime.
Nos vapuleó.
Es curioso que lleve un par de días pendiente de escribir un post sobre la felicidad, porque yo siempre me he considerado feliz,
porque siempre he considerado que la felicidad tenía que ver, sobre todo, con la actitud de uno mismo.
Pensaba hablar de lo saludable que es la tolerancia, la empatía, la humildad. Pensaba hablar de lo facil que podía ser todo si uno se pone del lado del de enfrente…
Hoy no voy a desarrollar ese tema, tal vez en otro momento.
Es curioso, tambien, que lleve varios días rondandome la cabeza una estrofa de una canción que hace muuuuuchos años que no escucho. Es una canción de Cristina Rosenvinge, y la estrofa es esta:
Yo soy buena chica,
o por lo menos lo parece.
Porque nadie me mira
cuando muerdo las paredes.
La cosa es que, efectivamente, llevo varios años mordiendo las paredes de mi casa.
No me preocupaba en exceso porque soy mas "de tirar p'alante" que de preocupaciones. Tambien porque era cada vez menos a menudo y porque conseguía, a veces a duras penas, seguir siendo feliz (según mi criterio) y porque, al fin y al cabo….
¿Quién no muerde las paredes de su casa de vez en cuando?
Hoy me siento fatal.
Y al mismo tiempo me siento genial porque, ayer, alguien me “dió permiso” (ponedle 6 o 7 pares de comillas más, por favor) para sentirme fatal. Para no ser yo la que cuidara a los demás (la tolerante, la empática…. ) para que alguien que me quiere, cuide de mi. Anda, como otra canción de Cristina
Pobre. La que le espera.
A lo mejor no es tan normal morder las paredes…. mira tu por donde.
O a lo mejor a lo que yo llamo morder las paredes…. es algo peor.
Parece que yo tambien tengo derecho a ser irresponsable e inmadura alguna vez y a otro me desfaga los entuertos… No sé, la teoría suena muy bien.
Y eso que el psicólogo era un poco…. charlatán, la verdad.
Utiliza unas herramientas que mi mente escéptica no puede aceptar así por las buenas….
Pero mi mente escéptica duda de los sies y tambien de los noes, y ayer, jugando conmigo de mala manera (que conste que me doy cuenta) me ayudó.
Estoy mas tranquila, me siento menos estresada, mas segura e incluso menos cansada.
Va a ser que lo necesitaba.
Que bien, a ver como evoluciona todo esto.
Movilizando que es gerundio.
4 Comments:
At 1:50 a. m., Cristina said…
Pues igual es que al tener permiso ya no te hace falta. O quizás sea eso de que es bueno hablar de ello. Pero, bueno, los psicólogos son personas, con sus cositas y sus neuras.
Cuídate. Bueno, no, que te cuiden, coñe!
At 9:30 a. m., Imperator said…
Como psicólogo, siempre me alegra de que alguien tome la decisión de acercarse a uno de mis colegas. Sobre todo si vuelve diciendo que le ha servido.
Respecto al tema de las herramientas, depende de la orientación que siga. Pero la que yo sigo está basada en el pensamiento escéptico, y cada uno encuentra la que mejor le va. Me alegro de que te sirviera.
At 4:36 p. m., Anónimo said…
Qué chungo lo que cuentas. Me da miedo y al tiempo me alivia.
¿Será porque me identifico taaaaanto con lo que dices?
At 8:47 p. m., cary said…
Bueno. Llevaba mucho tiempo pensando que necesitaba ir, pero yo tiendo a pensar que puedo con todo, de hecho le dije al psicólogo que a mi no me pasaba nada :) El tipo.... bueno, cuanto más lo analizo menos me gusta, pero, como me sirvió... le daremos otra oportunidad.
Besos mil
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